
Complementos alimenticios para mascotas
Los complementos alimenticios para mascotas han experimentado un aumento en las ventas de los últimos años según las consultoras TechNavio y Mordor Intelligence, quienes esperan que el crecimiento anual continúen a la alza en los próximos años. Cada vez más, se consumen vitaminas para perros.
A aquellos empresarios de la industria alimentaria a quienes les interese ampliar su línea de productos deben de tener en cuenta que los complementos alimenticios para mascotas no tienen todavía una legislación propia y, por tanto, dependen de la legislación general sobre alimentación animal vinculada al Ministerio de Agricultura.
Pero además, generalmente, en las instalaciones donde se elaboran productos destinados para el consumo humano, no se pueden elaborar alimentos para animales. Este mercado se guía por otro tipo de registro y tiene trámites diferentes.
¿POR QUÉ ESTÁ CRECIENDO LA VENTA DE COMPLEMENTOS ALIMENTICIOS PARA MASCOTAS?
El vínculo con las mascotas cada vez es más fuerte. Los dueños tienen a humanizar a sus mascotas y darles un trato cada vez más óptimo. Es por ello que la esperanza de vida de los animales de compañía ha crecido, lo que conlleva que también aumenten los problemas de salud a causa del envejecimiento.
Debido a la larga esperanza de vida que se les da a los animales de compañía, los veterinarios cada vez son más propensos a recomendar suplementos alimenticios que les alivien o prevengan de diversos problemas de salud.
COMPLEMENTOS ALIMENTICIOS PARA MASCOTAS MÁS COMUNES
Los productos que más se han demandado los últimos años para suministrar a las mascotas están relacionadas con:
Huesos y Articulaciones. La artritis y la osteoartritis son las enfermedades más comunes en el proceso de envejecimiento de los animales. Es por eso que los dueños demandan suplementos que alivien los dolores y patologías de las articulaciones, o incluso, los prevengan. La glucosamina, condroitina, el metilsulfonilmetano, la boswellia o yuca son los los ingredientes más solicitados en estos casos.
Control de peso. La esterilización de las mascotas y los múltiples caprichos que sus dueños les dan de manera desmedida están produciendo problemas de sobrepeso e incluso obesidad en los animales. Es por ello que la demanda de suplementos que mejoren este aspecto está también en incremento.
Aparato digestivo. Muchas mascotas tienen problemas digestivos, es por eso que los productos que contribuyen a mejorar la salud gastrointestinal están apuntando fuerte. Prebióticos, probióticos y enzimas digestivas son los productos más solicitados en estos casos.
Pelaje. Alergias estacionales, picores en la piel o irritaciones cutáneas son problemas habituales entre los animales de compañía. En este caso, son los ácidos grasos Omega-3 los que tienen cada Vez más demanda.
¿CUÁLES SON LOS RETOS DE MERCADO?
Los retos que afronta el mercado de complementos para mascotas, además de la necesidad de regular la actividad con una legislación propia, son la palatabilidad y el uso de ingredientes naturales y botanicals.
Actualmente, no existe una legislación específica para los complementos alimenticios para mascotas. La normativa básica que regula la alimentación animal es:
– el Reglamento 183/2005 (complementado a nivel nacional por el Real Decreto 821/2008) establece las normas generales en materia de higiene y trazabilidad de los alimentos de los animales, así como los requisitos de registro y autorización de operadores de alimentos para animales
– el Reglamento 1831/2003 que regula la utilización de aditivos en alimentación animal
– el Reglamento 767/2009 (complementado a nivel nacional por el Real Decreto 1002/2012) sobre la comercialización y la utilización de los alimentos para animales
– la Directiva 2002/32 (Real Decreto 465/2003) relativa a las sustancias y productos indeseables en la alimentación animal; en cuanto a la trasposición de esta Directiva hay que tener en cuenta que desde el año 2009 los anexos de la Directiva se están modificando mediante Reglamentos, y por tanto ya no se trasponen al Real Decreto (esto es, el Real Decreto traspone el texto de la Directiva, pero no los anexos).
Estas normativas se aplican a:
– la alimentación de los animales destinados a la producción de alimentos (y en ocasiones a los animales no productores de alimentos: animales de compañía, de zoo, de peletería, de experimentación, etc)
– las actividades de las empresas de piensos en todas las etapas del proceso, desde la producción primaria de piensos (incluida la explotación agrícola y ganadera) hasta su comercialización
– las importaciones y las exportaciones de piensos – no obstante, en general la regulación agroalimentaria europea no se aplica:
– a la alimentación de animales destinados al autoconsumo familiar (en los raros casos de que el autoconsumo está autorizado, por ejemplo aves y conejos en España)
– al suministro directo (a nivel local) de pequeñas cantidades de materias primas por agricultores, tanto directamente a las explotaciones ganaderas, como a establecimientos locales de venta al por menor de materias primas para el ganado.
Asimismo, como los humanos cada vez aprecian en mayor medida una composición lo más natural posible en los productos que consumen, eso mismo también reclaman para sus mascotas con las que tienen un fuerte vínculo de afecto y protección.